Entrevista a Ann Perelló

© Norberfilms© Norberfilms

© Norberfilms

Este próximo viernes 17 se estrena en cines la última película de Norberto Ramos del Val, Amor Tóxico, una comedia romántica enferma y retorcida escrita por Pablo Vázquez y Toni Junyent. Tendrá un estreno limitado, lo que para una cinta low cost es todo un logro, tras haber transitado con éxito por algunos festivales como el C-FEM de Murcia, donde recibió el premio al mejor guión y a la mejor actriz. Es precisamente a ella, Ann Perelló, a la que entrevistamos hoy.

Joven actriz curtida en televisión, sobre todo en TV3, tiene en Amor tóxico su segundo protagonista en cine tras haber participado también en Ote.lo. Le han bastado dos títulos para empezar a destacar en el panorama del cine independiente español.

¿Cómo llega este proyecto a tus manos?

Pues justo estaba rodando la serie Hotel Bellavista con Edu y me contó que iba a rodar la peli de Norber, a quien yo ya seguía de cerca, sobretodo por friki y molón. Ellos hablaron y Norberto contempló la idea de que yo fuera Irene y me escribió. Me mandó el guión y me dijo “depende de lo que me digas del guión lo harás tu”. Al leerlo le dije: “Quiero hacer esta frikada, móntatelo como quieras”. Y aquí estoy, un año después de haber vivido esta maravilla de viaje.

El personaje de Irene es una amalgama de contradicciones culminadas con una actitud que de alguna manera le lleva a jugar con cada situación o persona que tiene delante, en este caso Toni. ¿Cómo lo describirías y qué le mueve?

Irene es una chica perdida, como muchos de los seres humanos que vivimos en este mundo de redes sociales, apariencia e infelicidad. Ha aprendido a ponerse capas y a esconderse bajo las fotos de Instagram para no tener que aceptar lo que realmente siente y quiere en la vida, que al final se resume a un poco de amor (tanto externo como de una misma). Creo que ella no está jugando con la situación, es su incapacidad por controlar lo que le pasa por dentro, así con esa apariencia puede esconder su verdadera carencia.

El grueso de la película se centra en esa cita autodestructiva entre un ligón cobarde e insensible como Toni y tu personaje. ¿Cómo trabajasteis todo ese toma y daca entre ambos?

Al rodar la película en sólo 4 días tuvimos que ir al rodaje con todo bien preparado. Para ello estuvimos ensayando durante la semana anterior como si se tratara de una obra de teatro. Para mí fue realmente una locura aprenderme todo ese textazo de Toni y Pablo (algunas secuencias duraban 20 minutos) pero también ese reto me daba más adrenalina.

¿Cuánto hay de reto personal y cuánto de falta de dignidad en cada personaje al aguantar y aguantar en esas condiciones?

Para Irene es puro orgullo el gustar a Toni, sobretodo porque ella sin poderlo evitar se siente, cada vez, más atraída. Eso la lleva a hacer estupideces que, además, el alcohol agrava. Y ahí pierde un poco la dignidad, como nos pasa a todos.

¿En qué momento la humanidad del otro empieza a tomar peso?

Yo creo que la humanidad de Toni la afecta desde muy pronto y hay algo en él que es como un imán. Piensa “este tío es gilipollas pero, joder, tiene algo con lo que no puedo”. Ese “tiene algo” se va convirtiendo en “lo quiero para mí” y entonces es cuando ella realmente colapsa e intenta decirle a él que le gusta pero de unas maneras poco ortodoxas y sobretodo poco directas. Le pasa algo que creo que es muy contemporáneo de “me pasa algo por dentro que no sé cómo exteriorizar” y entonces la lía diciendo lo contrario a lo que quiere.

La película también parece ser un tiroteo a todo lo políticamente correcto y a cualquier convención (el amor romántico, ligar por Internet, las relaciones de usar y tirar, casi consumistas, el feminismo, el miedo a comprometerse, la incapacidad para lidiar con las emociones…). ¿Cómo abordas un trabajo y un personaje que desarma tantas cosas, muchas veces opuestas entre sí?

Al principio era una locura porque no entendía qué narices le pasaba a esta chica por la cabeza, pero poco a poco vas entrando en esa otra mente y tu orden lógico pasa a ser otro. Es como si me tirara en otra piscina distinta a la mía donde el agua tiene otra densidad, otra temperatura, color, olor… Y cuando llevas un rato ahí de repente todo tiene lógica y no entenderías un mundo visto de otra manera. Es peligroso y da miedo porque de repente hay discursos de Irene en los que estoy totalmente en contra pero por otro lado es muy placentero y se aprende una barbaridad. De hecho en el rodaje a veces me respondían o criticaban cosas que mi personaje decía y yo alucinaba de que no entendieran lo que quería decir. Ahora ya vuelvo a no entender tanto a Irene, claro.

¿Hasta qué punto esta película retrata las relaciones actuales?

A pesar de ser una locura y una borrachera creo que la película retrata la esencia de cómo nos relacionamos hoy en día y nuestra discapacidad emocional. Nos creamos personajes y discursos que no tienen nada que ver con lo que realmente queremos y sentimos y nos hacemos un lío. La de veces que he oído a amigos decir: “ay, quiero quedar con él/ella pero no le voy a escribir nada.” Hay que estar más conectados con nuestras necesidades e ir a por ello.

© Norberfilms© Norberfilms

© Norberfilms

Amor tóxico es tu segundo largometraje como protagonista y el segundo low-cost. ¿Cómo valoras este tipo de cine?

No me gusta mucho el término low-cost. Acepto el término cine indie o de guerrilla y prefiero pensarlo más así. Quiero creer que las cosas están cambiando y que estamos camino a que este tipo de cine exista y no a que subsista. En otros países cine independiente no significa no tener un duro. Hay que impulsar ese tipo de cine. Creo que aquí está repleto de talento y que está en auge a nivel creativo y debe de disponer de los medios que necesita, que obviamente son menores que otras producciones, pero no por ello es menos cine. Personalmente me encanta el cine más indie como espectadora y como actriz porque de alguna manera son proyectos más libres, pero hay que darlo a conocer al público y potenciarlo. Que llegar a las salas no sea una odisea ni un suicidio.

¿Hasta qué punto ha sido una suerte llegar con ambas películas a la salas comerciales?

Para mí es totalmente una suerte que ambos puedan llegar al público en salas y estoy tremendamente agradecida de que haya distribuidoras que sigan luchando por este tipo de cine. Mi objetivo sería combinar el cine más indie con producciones más comerciales.

Al ser un cine donde, por lo general, la gente no cobra. ¿Qué condiciones consideras necesarias para trabajar en un proyecto así? ¿Hasta qué punto es clave la idea de equipo y de compartir un fin?

A ver, para mí es imprescindible que el proyecto me mueva y creo que para todo el equipo tiene que ser así. Tienes que conectar con el mensaje que se quiere contar, tener la necesidad de que la película se haga y a partir de ahí ir todos a una. A parte de eso creo en que tendría que haber unas condiciones mínimas. Y realmente creo que el equipo tiene que tener algún tipo de retribución, ya que sino creo que estamos condenando la industria del cine, y espero que estemos yendo a ese camino. ¿Si ahora mismo me mandan un guión increíble con cero presupuesto? Seguramente diría que sí. Ése es el problema que tenemos los artistas, amamos esta profesión por encima de muchas cosas.

Amor Tóxico ha tenido hasta el momento un recorrido bastante exitoso en festivales donde incluso has obtenido el premio a la Mejor Actriz en Festival de Cine Fantástico Europeo de Murcia. Viéndolo ahora con más perspectiva y a punto del estreno ¿qué te ha aportado la película?

El proyecto me aportó muchísimo ya desde la fase de prerodaje y rodaje. Fue increíble meterme en la piel de esta señora loca y todo un reto de guión. Además en rodaje me lo pasé genial, realmente fuimos una familia y disfruté cada una de las secuencias a pesar de la falta de tiempo para poder hacer más tomas. A partir de ahí, cuando tu ya has hecho el trabajo sólo te queda sufrir un poco visualizándote y viendo tus errores y disfrutar de poder compartir el trabajo con el público. Realmente ha sido maravilloso el paso por festivales y el premio ha sido un poco la culminación de todo eso. No por eso me relajo y veo la película con más disfrute, sigo viendo dónde podría mejorar y creo que esa exigencia y perfeccionismo son buenos para poder avanzar y crecer como actriz.

Powered by WPeMatico